La definición del nuevo modelo de ciudad de las próximas décadas es el objetivo del nuevo Plan General que impulsará el Ayuntamiento. Antes, y por mandato legal, se realizará una consulta popular que favorezca el debate sobre los desafíos en materia urbanística y los principales ejes estratégicos.

El alcalde ha puesto sobre la mesa algunos de los retos que deben plantearse como el uso racional del suelo, la modernización de los barrios, la cohesión territorial y social o la movilidad sostenible. Según Carlos González, esta consulta es una herramienta para crear el nuevo PGOU desde el consenso y plantear una visión compartida de la ciudad. 

La consulta planteará como alternativas, el no tramitar el nuevo PGOU y continuar con el actual, la posibilidad de revisarlo y apostar por un crecimiento en el núcleo urbano de la ciudad y las pedanías y el desarrollo de actividades económicas en el Parque Empresarial. O la tercera opción, un crecimiento centrado solo en el casco urbano y el Parque Empresarial. 

Al debate sobre el futuro de la ciudad el gobierno local quiere incorporar a las formaciones políticas, colegios profesionales, asociaciones empresariales vinculadas al urbanismo, colectivos ambientales, vecinos, sindicatos y órganos como el Consejo Social.

La Junta Local de Gobierno aprobará mañana el documento base sobre el que se organizará la consulta pública. El proceso se desarrollará durante 30 días hábiles a partir del próximo lunes. Una vez concluido se elaborará un informe-propuesta con las alegaciones y sugerencias y ya se trabajará en la redacción de un documento preliminar y se iniciará la tramitación para convertirlo en definitivo.